Trabajada victoria (30-28) del equipo de Lorenzo Alonso, tras unos desquiciantes 20 minutos centrales de partido.

Llegaban ambos equipos en racha al segundo derbi regional que vive esta temporada un apático Pabellón Agustín Muñoz, y por emoción, juego y actitud no desmereció, ya que ambos equipos lo dieron todo por conseguir dos valiosos puntos tanto para la clasificación como para la moral del grupo.

Comenzaba de un modo eléctrico el partido, con defensas contundentes y dinamismo en ataque. Juan García, nuestro joven guardameta se encarnaría rápidamente en una de las figuras del encuentro deteniendo hábilmente los tres primeros lanzamientos de pena máxima que dispuso el equipo visitante. Ya en la segunda mitad se resolvería otro dejando en 3 de 7 los números desde los siete metros del equipo universitario.

Por otro lado, los chicos del RITEC comenzaron resolutivos en ataque y consiguiendo una difícil renta de tres tantos, pese a las exclusiones en la primera fase del partido (11-8), lo que provocaría el tiempo muerto de José Antonio Moreno, técnico de UCAM, para calmar y realizar cambios en su defensa aumentando la intensidad de la misma.

Este tiempo muerto, fue un punto de inflexión para el desarrollo del partido ya que los capitalinos, gracias a una defensa mixta, conseguían generar dudas en el ataque aguileño, reduciendo así la renta y marchándose al descanso con un resultado que dejaba muy abierta la segunda mitad (14-16).

Tras la reanudación, la defensa murciana continuaba poniendo en apuros a nuestro ataque y, aunque en defensa encontrábamos solidez, los chicos de la UCAM conseguían la mayor renta del encuentro antes de los diez primeros minutos de la reanudación, 16-23.

Tocaba remar a contracorriente, y el equipo remó, confiaron en sí mismos y defensa a defensa y ataque a ataque, ayudados por una buena segunda mitad en el debut de Eduardo Salazar, guardameta recientemente incorporado desde Handbol Sant Joan, y que cuajó actuaciones de mérito en los momentos decisivos del partido, permitió al equipo recortar las distancias y volverse a meter en el encuentro. Con un parcial de 11 a 3, volvían los pupilos de Lorenzo a ponerse por delante, para encarrilar en el último minuto, y no sin emoción, un partido digno de un derbi como el que aconteció.

32-30, resultado final que sirve para encaramar al equipo a la quinta posición del grupo E de la Primera División Estatal. Sin duda, el trabajo, la constancia y el buen hacer de este grupo de guerreros nos está brindando y seguro, nos brindará, momentos únicos esta temporada.

Próximo partido, sábado 21 de noviembre a las 19:30h en el Pabellón Cecilio Gallego de Torrevieja.

Seguimos!!